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Requiere BC una aduana comercial de primer mundo

El dirigente de la Canieti Noroeste destacó que norteamérica es más atractiva para los corporativos, luego de la experiencia con la pandemia, pero la aduana actual no es práctica.

Uno de los retos que tiene la industria ante la nueva normalidad es contar con cruces de mercancías mucho más eficientes, pues hoy en día las instalaciones de la aduana son insuficientes y poco funcionales, mientras que el proyecto de la segunda garita en Otay está paralizado.

Así lo sentenció Román Caso Espinosa, presidente de la Cámara Nacional de la Industria Electrónica, Telecomunicaciones y Tecnologías de la Información (Canieti), zona Noroeste, durante su participación en la reunión bimestral de Smart Border Coalition, que dirige Gustavo de la Fuente.

“Los bemoles del día a día es que hacemos negocios con Estados Unidos, tenemos maquilas de las marcas más importantes en el mundo, pero todo transita por un sistema de garitas pésimo, pequeño y desactualizado, que apenas y puede con el tráfico comercial actual, por ende no podría con un crecimiento de operaciones o de más empresas de la industria de exportación”, criticó el dirigente.

Consideró necesario entender  la realidad en que se trabaja, en términos de la operatividad, donde se tienen centros de producción muy importantes, que cumplen con estándares de calidad de nivel mundial.

Sin embargo, destacó, las instalaciones de la aduana para los cruces comerciales se mantienen antiguas, sin practicidad, generando caos vial en las vialidades residenciales aledañas, obligando a las empresas a ajustar sus tiempos y procesos de producción para lidiar con las largas filas.

“Los proyectos como la segunda garita en Otay, con casi cinco años de estancada, deberían impulsarse y ser de gran trascendencia para los empresarios y el gobierno, pero vemos que continúa guardado en el escritorio”, comentó.

Y es que ante la nueva normalidad ocasionada por la pandemia de covid-19, refirió, en el mundo ha cobrado interés el “neat shoring” como nuevo apuntalamiento de la industria, el cual se posiciona como una tendencia fuerte, donde los corporativos se han dado cuenta que el concentrar su producción en un solo lugar del mundo no es lo ideal.

“Ahí es que Norteamérica se empieza a ver más atractivo, y México es el país de Latinoamérica más atractivo para el “near shoring”, por la madurez que tiene en la industria y los esquemas de operación, por eso tendríamos que contar con cruces más eficientes”, explicó.

En este sentido, abundó Román Caso, Baja California tiene competencia con otros estados, por lo que es importante especializarse en cuatro o cinco sectores donde ya se tiene experiencia, y así convertirse en polo de esas inversiones.

“La pandemia ya puso en perspectiva que puede haber algo totalmente ajeno a la economía y las políticas de un país, como es la salud, entonces tenemos que ver cómo los empresarios podemos implementar estrategias para mantener viva la economía industrial y poderla de forma responsable reactivar gradualmente, conforme el mercado lo va demandando”, enfatizó.

Por último, el líder de la Canieti Noroeste afirmó que esto pone a Baja California en uno de las top regiones que tienden a poderse recuperar, subrayando la necesidad de que los organismos empresariales tengan una interrelación para afrontar los retos venideros.